lunes, octubre 28, 2013

Esperanza

Te enfrentas a mi.
Frente alta y voz no tan firme.
Y me dices que me quieres.
Y bajas la mirada.
Y me doy cuenta mientras te observo,
anonadado,
que tus orejas están coloradas.
Y mis manos se dirigen a tocarlas.
Y las detengo.
Y asimilo entonces
que detrás de este acto de valor,
en el que te vuelves vulnerable,
hay inseguridad y miedo, y recato.
Y también hay amor
y lucha y esperanza, y guerra.
// Maybe more than hope.
Y el pundonor te hace elevar la cara
hacia mi y tu mirada se llena de preguntas.
En ese momento, resuena el silencio.
Ese enemigo de toda declaración.
Ausencia en la que te he sumido.
Y es que mi mente ante la sorpresa
ha cortocircuitado.
Y sólo he sido capaz de permanecer
quieto atisbando
las emociones que subyacen
a los cambios de coloración.
Y ahí están para que mis ojos los descubran
los sentimientos que yo nunca había visto
y que tu nunca habías ocultado.
Y me preguntas si he oído
lo que has manifestado.
Y yo, sonrío, ante ti
que eres tan valiente
que me regalas tu corazón
y puede que tu alma.
Y tu no entiendes.
Y poco a poco,
porque yo también tengo miedo,
y soy bastante más cobarde
y las palabras no acuden a mi boca
y sólo queda la imagen de tus labios
y tus orejas rojas,
me acerco
te rodeo con mis brazos
y te doy un beso.
Y tu sigues sin entender.
Pero te sumerges
en mi dejando
la batalla para otro momento.
Y quizá, aunque tu aún no lo sepas
puede que te ame más por este
acto consciente de guerra.

viernes, octubre 25, 2013

¿Por qué sonríes?

Y me comentas
que es la primera vez
que has decidido
conscientemente
luchar por aquello
en lo que crees.
Y me miras
y me preguntas
por qué sonrío.
Y yo,
que simplemente
existo
también simplemente
sonrío.

Entre lo divino
y lo humano,
te hablo
de la dureza
y grandiosidad
de la vida.
Y me recuerdo,
al compartirme
contigo,
que las cosas
sin las que hoy
no querría vivir
han sido aquellas
que han supuesto
un salto
de fe
absoluto.
Aquellas que mi fuero interno
gritaba porque aferrase a mi vida
y la lógica y la razón
alertaban la necesidad
de salir corriendo.
Y no negaré las lágrimas
ni la lucha
contra mi
y contra los demás,
// aquellos que nunca tienen todas las piezas del puzle que me compone,
pero tampoco
olvidaré detallarte
las alegrías
que conlleva
creer en uno mismo
y defender aquello en lo que se cree.
Porque es eso
lo que al final del día
nos permite
una sonrisa
de esas
que bien sea
derrotada
o victoriosa
siempre hace
que la gente
pregunte
por qué sonríes.
Y tu nunca
respondes
porque quien dio
el salto
sabe exáctamente
porque.

jueves, octubre 24, 2013

Plural

Nunca se me dio bien
ser nosotros.
Sólo conseguí
ser primera persona en plural
contigo.
Nunca entendí
por qué tenía que ser parte
de una comunidad
mayor para existir.
Difuminarme y unirme
para vencer.
A veces pude
ser parte
de algo más grande
y sin embargo
nunca pareció ser un nosotros.
Más bien, se quedó
en un yo y vosotros conmigo;
quizá tu, yo, ella y los demás
pero nunca conformó un nosotros.
Sin embargo, contigo
somos, reímos, lloramos y vivimos
en esta primera persona
del presente plural.
Y no se me hace extraño
que se disuelvan
las lindes
de mi individualidad.
Y creo, en el fondo
que eso es el amor
esa capacidad
de olvidar las fronteras
entre el singular
y el plural, establecido por la normas
de la gramática.

martes, octubre 22, 2013

Cerezas y origami

Echo de menos,
ese color rojo
con sabor a cereza
del que se teñían tus labios
al sonreír
mirando hacia mi.
Echo de menos
la energía
que contrastaba
con el olor a lluvia
los meses de invierno
en los que me obligabas
a ponerme pies
para acompañarte a pasear
o a sentarme a escribir.
Echo de menos
los abrazos,
esos silenciosos
que escondían
los secretos
que nunca
me contabas
y por los que nunca pregunté,
pero guardaban mundos
excéntricos y dulces
como los poemas
que me leías antes de dormir.
Echo de menos
que te quieras
y me regales
poemas
en figuritas
de origami
que yo nunca aprendí
a devolver.
Y echo de menos
todo eso
//y mucho más
porque te quiero
sin razón,
sin tiempo
y sin espacio
que es la única
forma de querer.
Y este amor
hace que al verte sonreír
mi corazón
salte de alegría
y tus carcajadas
suenan en mis tímpanos
mejor
que cualquier
musiquilla feliz.

lunes, octubre 21, 2013

Intentando hacer lo correcto

Y se me engancha
tu amor,
al corazón.
Y aunque 
no quiero
que te alejes
intento
desenredarte.
Sin conseguir
poner orden
en esta maraña
de sentimientos
propios y ajenos.
Todo ello,
a pesar
de mi 
deseo
de que seas libre.
Pero tu
te prendes
agarrando
las vísceras
que rodean
este alma
que te contiene.
Y a mi,
que me gusta
conservarte
cerca,
se me olvida
que debo
soltar
el lío.
Y pongo excusas
porque es tan bonito
asirte
y encontrarte
conectado
a mi
a través
del corazón,
que tengo la tentación
de enmarañar
tu amor
un poquito más
y no dejarte
nunca ir.
Aunque en el fondo
que debo
desenvolvernos
y dejarte
existir.

viernes, octubre 18, 2013

Soul eater

Me consume.
No poder
poseerte
por completo.
Así que me conformo
con ir
devorando
partes de ti
que nadie
se había atrevido
a reclamar
previamente.
Y poco a poco
esos pedacitos
no explorados
son descubiertos
y sacian
parte de mi apetito,
que sigue creciendo.
Pero temo
que este impulso
un día
sea demasiado...
y ya no queden
retazos de ti
para satisfacer
este deseo
desordenado
de que me completes.
En un momento
no muy futuro
despertaré
y no habré dejado
nada de ti
sin consumir.

martes, octubre 15, 2013

In-esperado

Hoy,
como siempre
presente,
sonrío
porque al despertarme
en mitad de la noche
alargo el brazo
que toma forma
alrededor
de tu figura.
Y en medio
de mi sueño
interrumpido
aparece
la alegría
en el segundo
en el que existo
de manera consciente
y recuerdo
que duerme
conmigo.

sábado, octubre 12, 2013

Arte

Amé
las partes de ti
que hoy me duelen.
Y sé
que rompí
lo que nadie tiene.

lunes, octubre 07, 2013

Mis temores

Y es curioso.
Dices
// o quizá yo entiendo
que lees en mis poemas
la falta de confianza
y el miedo.
Y yo,
después de pensarlo mucho,
colijo
que algo resuena en ti
de la despreocupación
a exteriorizar
por escrito
esos temores
// las penas y vulnerabilidad
que poco a poco
conquisto.
Pero existen.
Y no me asusta que estén.
Y me gusta hablar de ellos.
// Tal vez sean mi parte humana.
Y vuelven
a ser reales
cada vez que tengo que enfrentarlos.
Son como el dolor
que habita para ayudarnos a crecer,
como lección de autoaprendizaje.
Y cuando resurgen
los afronto
con sonrisas
que esconden los nervios.
Ha habido
personitas
durante mi vida
que han intentado darme fuerza
asir la confianza
como forma de eliminar los miedos.
Han intentado enseñarme
a cabalgar mis neuras.
Conmigo no funciona
a largo plazo.
He aprendido
que en mi caso
la fuerza nace de dentro.
Surge de mi monstruo
que tiene miedo,
y le sobra amor
y a menudo se olvida
de que le miran
porque hay cosas que hacer
que son mucho más importantes.
Reside en saber
que tengo buenos amigos
y una gran familia
que actuarán de servicio técnico
si es necesario.
Y esas cosas
me dan fuerzas para hablar
de mis temores,
de dejar que el monstruo
se explique
y se llore
y se deje ser vulnerable,
porque eso,
según he descubierto
le ayuda
a desempolvarse
las rodillas
y seguir hacia adelante.
Y sí, a menudo
soy recelosa
y me pongo máscaras,
¿por qué no?
No son malas si yo sé que están ahí
y entiendo por qué las pongo.
Así que aunque entiendo
que quieras más para mi
y agradezco tanto amor
creo que mi manera de hacer frente
la realidad,
ese mundo con el que no siempre
consigo ponerme de acuerdo
pero en el que adoro vivir,
me hacer fuerte.
Y vulnerable.
Y me gustan
esas partes de mi
que tienen miedo.
Porque en el fondo
no me gusta
llorar porque alguien piense
que puedo ser más o mejor
porque quien tengo que ser,
al final de día,
soy yo.
Aunque el ser yo misma
otros lo vean como excusas
para esconderme
y seguir haciendo caso a mis temores.

viernes, octubre 04, 2013

Explicando cómo

Es la habilidad
de mi monstruo
la de hacer amigos.
Y ellos,
estas personas
que cinco segundos antes
eran extraños,
cuando le ven
sonríen.
Como se sonríe
a un niño de 5 años,
/* henchido el pecho
de cariño
y los ojos de expectación.*/
Porque descubren
al que les escucha
que intenta buscar soluciones
o que a menudo
intenta simplemente
explicar su mundo,
lleno de gente
y de metáforas
y de ideas desordenadas.
Ese pequeño ser
que tiene ganas
de empujarnos
fuera de nuestra pequeña vida
y llenarla
sabrá 2 de qué.
Y en ese momento les recorre
un escalofrío
y en su alma
resuena el eco de su sonrisa
y mi monstruo sabe
que ha hecho un amigo.

jueves, octubre 03, 2013

Lucha

Detesto
estar mala.
Esta impotencia
de no poder moverme
sin que me duela.
Incluso de no poder
abrir los ojos
aunque quiera
con todas mis fuerzas.
Y a menudo
me obligo
a salir
de la cama,
de casa,
de mi vida.
Y me desplazo
a momentos
nuevos o rutinarios.
Mientras ese malestar
que demasiadas veces
parece crónico
sigue corrompiendo
mi motivación
y minando
mi voluntad.
Reconoceré
que hay días
en los que pierdo
la batalla.
Y es ese instante
en el que me sumo
en la frustración
de estar tarada
y ser defectuosa
// o como dice un amigo averiada.
Esos períodos
son en los que indulgentemente
descanso
y me permito
la aflicción.
Pero no se ve.
Y no es que lo esconda,
es que normalmente
gano el asalto,
si no la guerra.
Y esos días,
los que me declaro
vencedora,
no me apetece hablar
aunque me sufra.
Esos momentos
prefiero iluminarme
con sonrisas.
Porque sé
lo que cuesta llegar
y cuando lo consigo
alegría y amor
son mis recompensas.

martes, octubre 01, 2013

Piropo

Y te miro maravillada.
Sonriendo desde asiento preferente.
Observo como te desenvuelves
por la vida
y te entrelazas
con otros mundos.
Examino detenidamente
sin apartar la mirada
como siembras
seguridad y apoyo
en los demás.
Como prestas un poquito
de tu confianza
y regalas mucho más.
Reconoces las fortalezas,
lo único, la esencia
y actúas de refuerzo
frente a las debilidades.
Y veo orgullosa
que los demás,
aquellos que tienen suerte
de estar cerca de tu corazón
o tu influencia,
crecen y conquistan
las metas y los momentos
que no siempre creyeron
poder alcanzar.
O simplemente sonríen más.
Y eres árbol, guía y puerto,
ofreciendo cobijo, consejos y amor.
Pero quizá lo más hermoso
es que entiendes
lo importante
que es dar autonomía
y dejar que sean ellos
los que tomen decisiones
y las respetas.
Y cuando caen
estas cerca por si hace falta recogerles
sin reproches
porque hay que trabajar
para recomponer
y no hundir, ni cambiar.
Y durante el camino
das ánimos y fuerzas,
y ayudas a buscar soluciones
y esquivar problemas.
Y cuando vencen
estas con un abrazo y la sonrisa,
esa que me enamora
e ilumina tu mirada.
A Javi.