domingo, febrero 26, 2012

Des-igual

Escucho
una y otra y otra vez
tus historias
// tristes
que se repiten
exáctamente igual.
Los mismos escenarios,
/*las frases ya manidas,
los roles negligentes,*/
aunque cambie algún personaje
parece que rebobines
y vuelvas a poner
/*la misma cinta,
el mismo DVD,*/
la misma lista de reproducción
una y otra y otra vez.
Y aquí estás una vez más
llorando; preguntándote:
¿por qué siempre
escoges mal
al actor protagonista?

miércoles, febrero 22, 2012

Devoción

Las madres son nobles
hasta en sus lágrimas,
que normalmente,
abandonan su mirada
bien, por sus hijos
bien, por los seres,
no siempre merecedores,
a los que aman.

lunes, febrero 20, 2012

El tren de los sueños de EDEBE

Ayer me encontré con este post en El mundo desde mi koyak rojo, buscando la canción en youtube del tren de los sueños. (Ya sé kojak). Aunque para mi el amarillo era el primer vagón y el azul el segundo pero este otro blog del CEIP Doctor Caravaca con las imágenes me hace pensar que en eso estaba equivocada yo.

Y finalmente creo que he conseguido recordar toda la canción (no recordaba el vagón blanco):

Al tren de los sueños dale regaliz
pipas, caramelos y te hará feliz,
lo conduce un duende,
por la noche noche,
y en el esconde sorpresas,
oh, oh.

El vagón primero de color azul,
es para el recreo a jugar tú, tú.
El vagón segundo es el amarillo,
con sala de juego, tele y cuentecillos.

El vagón tercero, blanco como harina,
tiene pastelillos, uno en la cocina.
El vagón de cola es multicolor,
como en primavera, todo el campo en flor.

No sé si hay más vagones, esto es todo lo que yo recuerdo. Por cierto los segundos sentidos de la canción, pueden ser curiosos. Aunque a mi personalmente me encanta esta canción.

PD:
Tara ha creado un post maravilloso en su blog sobre esto mismo :P

domingo, febrero 19, 2012

Puntualidad

Me gustan tus historias de amor tristes.
En las que no te quedas a mi lado.
En las que algún amor pasajero te aparta de mi.
Y tras escribirlas vuelves a mis brazos.
Hambrienta de amor; despertando mi apetito de ti.

jueves, febrero 16, 2012

Papiroflexia

Me gusta tu forma en origami, te guardo al lado de las grullas de arcoiris que Javi me hizo en un avión de regreso a nuestro hogar, cerca están las cartas de pitufos que coleccionaba de pequeña, con algún fascículo de los cuentacuentos que acompañaron los viajes de mi infancia y el primer billete de 20 euros que tuve.

Te guardo junto los tesoros que le recuerdan a mi alma que el amor es maravilloso. Así que no me vale que te dejes arrugar, ni te concentres en los defectos. Nada en esta vida es perfecto, pero tu eres hermosa.

Estoy segura que has originado millones de poemas, de que hay almas que suspiran al leer lo que escribes, aunque lo escondas dentro de flores o animales de papel.

Para Carmen. Por cierto, tienes que dejar que lata tu corazón, 
porque si no no podré oír la música hermosa que emana de él.

miércoles, febrero 15, 2012

Clandestina

Te robo:
las zapatillas de andar por casa,
el chocolate,
las sudaderas,
el lado de la cama...

Pero lo que más me gusta
es robarte
el corazón.

martes, febrero 14, 2012

Por supuesto

No sé muy bien que decir
cuando te revuelves
y me pides que cambie el mundo.
No sé muy bien como actuar
ante las injusticias
que me rompen el corazón.
No sé muy bien convencer
a los demás de que necesitamos
dar la vuelta a los valores.
Que no importan la línea,
la fama o las arrugas
cuando hay gente
que no tiene vida
casa, familia,
dignidad, acceso...
o simplemente un poco
de comprensión
cosas que los demás damos por sentado.
No,
no sé cómo hacer
que la gente se conciencie
se preocupe
se una a esta lucha
que parece perdida
desde su inicio.
Y sin embargo,
te entiendo,
te lloro, a escondidas,
no te vayas a dar cuenta
de que me frustra
no poder cambiar tu mundo.
Quizá con esto, pueda ayudar a pensar a otros.

domingo, febrero 12, 2012

Alta traición

Me gusta vestirme con el olor
que nuestros cuerpos secretan
cuando dejas mi sexo satisfecho.
Disfrutarlo durante los minutos
en los que mis ojos se cierran
en el instante posterior.
Y sin embargo, me desnudo de ti,
en esta ducha adúltera,
antes de irme a trabajar.
Para que nadie pueda intuir
que me has conquistado
despojándome de murallas.
Me gusta conservar la sensación
de tu olor en mis papilas
y de tu ser, en el tacto de mi piel.