domingo, abril 19, 2009

Independencia

Imagino que ya he hablado de esto desde otras perspectivas pero hoy ha vuelto a mi mente. Es la famosa frase de Les das lo que tu no tuviste, pero te olvidas de darles lo que tuviste. Ser padre no es fácil, no hay un manual, cada niño es diferente. Todos exigen tiempo.

Últimamente por trabajo y por estudios he caido en la gestión empresarial. Hoy leyendo el libro de Sociología de las Organizaciones de mi profesor Lucas Marín me he encontrado con la evolución de esta disciplina. Voy a ir rápido y saltarme algunos pasos. Las cosas que se explican en este proceso las he dado yo en relaciones públicas internas. Primero llegó un ingeniero, como no, que quería aumentar la productividad, hablo por supuesto de Taylor. Después nos dimos cuenta de que hacían falta más cosas y las relaciones en el trabajo importaban. Finalmente llegamos a lo que se conoce como la "Teoría Y". Después vendrán más pero vamos a quedarnos aquí, porque me ha planteado dudas interesantes. Llegados a McGregor, dice que las personas son naturalmente activas, fijan metas y disfrutan de sus empresas, que buscan la satisfacición en el trabajo y que las personas maduras buscan independencia, autorrealización y responsabilidad... Es decir, que son capaces de autodirigirse desde una gestión participativa con sus jefes.

Pero, y aquí viene mi pregunta si estamos educando y promoviendo como valores la eterna adolescencia ¿cómo podremos llegar a ser adultos o madurar? ¿y si no maduramos nos sirve este tipo de aproximaciones al trabajo? No seré yo quien diga que los valores han muerto. Han cambiado hacia otros más propicios para el capitalismo. Me atrevería a exponer que lo que ha variado es su posicionamiento en nuestra mente. Si lo que define tu estatus social es lo que consumes, la cantidad de amigos que tienes en facebook, la cantidad de gente que entra en tu blog o el tipo de música que escuchas determina el resto de tu contexto social, si tus padres te proveen de todo lo que necesitas y no exigen nada a cambio ¿con valores diferentes, realmente, es plausible esta teoría?

Hay experiencias de que esto funciona. No lo niego pero hay que encontrar a la generación y las personas adecuadas. Habrá gente, siempre, que no sea feliz en el trabajo o que intente obtener el máximo beneficio sin trabajar, no cuestiono eso. Recuerdo que una manzana podrida puede hacer que todo el comunismo se vaya al garete.

Soy consciente del creciente trabajo que mucha gente ejerce sin compensación económica y que se vería reflejado en una ética hacker del trabajo. Además según yo he entendido la teoría Y en un punto defiende que has encontrado al trabajador perfecto si lo que tiene que hacer en la oficina es lo mismo que hace en su tiempo de ocio. Entonces las niñas cuya máxima aspiración en la vida es llevar el peinado más chulo serían perfectas peluqueras, pero ¿estan dispuestas a esforzarse para conseguir llegar a esta profesión? Y lo que es más importante, si sus padres les han acostumbrado a un nivel de vida, ¿podrán vivir en una clase social inferior? Renunciar a comprarse ropa es un drama para algunas. Otra duda, ¿la industria creará trabajos en sectores donde la gente está supliendo carencias por amor al arte? ¿se encontrará la manera de sacar beneficio a ciertas habilidades?

No tengo yo muy claro que el esfuerzo para alcanzar un objetivo sea más un valor, además con las reformas educativas cada vez pedimos menos esfuerzo a unas generaciones cada vez más inteligentes. ¿Educamos a nuestro futuro o creamos parásitos? Siempre hubo parásitos sociales, siempre se intentó dar pan y circo para el pueblo; de acuerdo. Una sociedad que cada vez demanda más igualdad, realmente la quiere y esta dispuesta a realizar el esfuerzo que necesita. Entiendo que los padres no tienen tiempo, que las comunidades tradicionales han desaparecido y se estan creando comunidades virtuales difíciles de supervisar. Pero los niños siguen siendo niños y siguen aprendiendo igual, siguen necesitando gente que pase tiempo con ellos, siguen necesitando que sus padres renuncien a parte de sus vidas por ellos. Pero como eternos adolescentes no estamos dispuestos a hacerlo. Entonces, si nosotros no maduramos ¿madurarán ellos? ¿podrán tener un trabajo, gobierno o grupo social sin un dirigente paternalista? ¿Disfrutarán de independencia? Me genera dudas. Ya dijo Sennet aquello de La Corrosión del Carácter, y no quiero ser pesimista, pero si no cambiamos nuestras dinámicas sociales esto petará por alguna parte y será nuestro futuro.

lunes, abril 13, 2009

Aborto

Desapareció la luz;
silencio;
quedé a oscuras.

Un llanto en mi interior.

He despertado en una habitación,
blanca, acolchada, desnuda;
mi garganta absorbe la sensación
de pánico tras la locura.
En un momento de realidad
amanece, rígida, la cordura.

Vuelvo a aquel instante,
recuerdo,
no quiero revivirlo,
te niego.
Duermo.


Te maté.
No fue mi imaginación.
Estrangulé tu infancia.
Cedió la respiración.

Entre mis manos, murió tu tiempo.