miércoles, mayo 09, 2012

Extraños en un tren

Estás en las historias.
En las anécdotas
que dibujan mi pasado.
Fotos en sepia,
en las que nadie sonríe.
Y ya no estás en mi presente.
No importa, ni antes, ni ahora.
No me perturba.
No inquieta noches en vela.
Sin embargo se revela cruel
que vivir sin alguien,
sea tan simple,
tras habernos compartido.
¡Qué injusta
la condición humana!
Ni siquiera parece extraño
no recordarte
hasta que no aparece el suceso
en el que sólo actúas
como parte del reparto.
Tal vez como parte del aprendizaje
que los dos necesitábamos.
Tanto tiempo juntos.
Y hoy importa tan poco.
Agradezco que seas feliz,
lejos de mi.
En las historias
simplemente eres
alguien a quien conocí.
Si algún día te acercas,
espero recordarte,
aunque no prometo nada.
Puede que te pregunte:
Nos conocimos, ¿verdad?
¿Sonreirás?, quizás no.
Sería esperar demasiado.
Y tras ese instante
volverás a ese lugar
en las sombras
que ocupas ahora.
A las fotografías
envejecidas,
en las que las sonrisas
se borran.
Siendo sólo actor
secundario
en las anécdotas
que construyen
mi pasado.
Probablemente,
en algún momento,
ya no muy lejano,
me ataque el alzheimer
y se me olvide
escribir tu nombre
en los créditos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya estaba dentro del vagón. Las puertas se habían cerrado, mi impermeable casi queda cazado entre las dos. Rapidamente tomo asiento. Miro a través de la ventana y veo pasar rapidamente los recuerdos entre los árboles.Ya no quiero recordar, solo mirar al frente, de soslayo obviar las casas, los montes. Hacer oídos sordos, trenzar mi lengua, reprimir impulsos y cuando tú pases, a picar billete, te darás cuenta que no pone nombre, dirección ni fecha. Un golpe de aire te arrebatará de tus manos ese rectángulo enano cuando yo oiga el clik de tu taladradora y llame al orden tu desvarío antes de perder yo, el mío.
Descenderé y tú quedarás pensativo, ¿por qué no dije aquello? se lo diré mañana.

Para ti, escritora de mil cuentos, de mil historias y muchos amores.

Besos
Elena

Anónimo dijo...

Lo extraño es, no recordarlo.
Que solo sea parte de la historia.
Ojala nunca lo olvide, me quede aunque solo sea el recuerdo.
También me gusta el recuerdo de esa sensación que se sentía y ya no esta.
Al final. Solo queda eso, todos los recuerdos. Desde el primer día hasta el último de nuestras vidas.

Gracias por este texto.
En 2012 lo leí, y hoy lo necesitaba recordar.

mnznt dijo...

Gracias por leerlo y porque resuene algo de lo que escribo en ti.

Siempre habrá gente que quiera borrar el pasado. Yo creo en vivir desde la honestidad e intentando hacerlo lo mejor que sabemos. Y eso conlleva aprender y perdonar, y por lo tanto guardar el pasado con cariño y cierta dosis de verdad.

No borré mi pasado porque siempre fui yo misma.