Nunca le dirás a nadie: ni loca me iría a vivir contigo. Mucho menos si estas enfadado.
7 comentarios:
Anónimo
dijo...
Soy "anónimo-2". De acuerdo en tu última coletilla sobre la asertividad. Basado en cosas que me han pasado en mi vida, cada vez tengo más claro, que a la hora de dar nuestra opinión a otra persona sobre ella, hay que ser sumamente respetuoso y pensar muy pero que muy mucho lo que le vas a decir, porque si le dices lo que piensas demasiado crudamente pueda ser en la mayoría de los casos que las formas serán injustas, puedan ser incluso desproporcionadas porque parten ya desde nuestro punto de vista subjetivo y lo subjetivo no se suele ajustar a la realidad de la otra persona por muy cargado de razones que creamos estar. Además la otra persona lo va a vivir como un ataque personal y por tanto el fin que perseguimos no lo vamos a alcanzar, en la mayoría de los casos solo conseguimos entristecer a la otra persona, o encoleralizarla y tendremos un nuevo enémigo o alguien ya resentido. Si no queda otro remedio que decirle a alguien algo, creo que habrá que decirlo de la mejor forma posible, sin humillar, sin añadir comentarios y valoraciones sobre su persona o su grado de valía. Intentar encontrar la forma más justa para los dos partes y para nada de forma hiriente porque a todos nos gusta que nos traten bien y siempre se recibe mejor un cometario sobre nosotros dicho de forma amable. En mis años de juventud compartí vivienda con mucha gente, el motivo era la economía, que saliera el alquiler más barato. Conocí muy dierentes formas de ser, de pensar, de reaccionar...a la larga es enriquecedor, aunque algunas experiencias han quedado como espinas clavadas en mi alma aunque ya sé que esto es la vida y así aprendemos. Digo, que una vez, había una persona que me molestaba su forma de actuar, siempre preguntaba demasiadas cosas personales y me hacía sentirme incómoda. Un día, cogí y le dije lo que opinaba de ese comportamiento. Pudiera ser que yo tuviera razón pero el caso es ...que la dejé llorando desconsoladamente. Es una figura que tengo en mi mente, que si pudiera rebobinar mi vida, la cambiaría. Hoy no lo haría, me arrepiento. Lo mismo que lamento todas las otras veces que he podido ser injusta con alguien en mi vida. Algunas ya no viven y nunca podré pedirle perdón. Sigue escribiendo. Un saludo.
Estoy de acuerdo hasta cierto punto. Pero nunca nadie tiene razón. No sé hacerlo de otra manera, cuando interiorizo algunas cosas se vuelven tan parte de mi que no controlo la violencia con la que salen. Después hay personas a las que si no te pones serio no se enteran, no lo reciben, y no lo juzgo con malicia, más bien me da lástima. La inconsciencia es uno de los peores defectos porque no suele tener buenas consecuencias. En mi vida habitual soy demasiado dulce como para que parezca que esa bruja cruel vive dentro de mi, y hay gente que no se da cuenta, hasta que sale, de que no todo el monte es orégano. Mi único objetivo era que supiese que no me quería ir a vivir con él. Sus sentimientos pasaron a un segundo plano en el momento que quiso saber la verdad y pedía más y más. La ignorancia es la dueña de la felicidad. Si te doy una razón y no te vale, te daré otra o ejemplificaré, siempre me estoy explicando y no me doy cuenta de que tengo que parar, y decir, de acuerdo, a ti no te sirve pero es mi justificación. Nunca digo que una vida es fácil, ninguna lo es y dependen del grado de madurez. Yo sé que no lo miraré igual, y hasta cierto punto no me preocupa mucho que el no me mire igual. Vivir juntos es compartir demasiado para mi con esta persona. Conozco mis limitaciones y soy capaz de juzgar rápidamente si una persona me conviene (es un don y una maldición, lo sé por experiencia). Le dije que nuestros carácteres no eran compatibles y que era culpa mía pero eso él no lo escuchó. Se quedó en los detalles puntuales que ejemplificaban su conducta y los utlizó para acentuar cosas por las que él se sentía culpable. Puedo respetar su forma de actuar, lo cual no significa que la tenga que compartir. Sé lo que llevó a mi amigo a actuar como lo hizo, pero yo no estaba dispuesta a jugar el rol que él quería adjudicarme y que yo veía venir. Yo no sé mucho de la vida, sólo tengo 26 años. Pero lo que tengo muy claro es que no quiero. Nunca me preocupó no ser amada por alguien a quien yo no amo, ni me quita el sueño tener enemigos. No aspiro a no tenerlos soy demasiado dificil y muy compleja. Considero que la justicia está algo sobrevalorada, nadie es justo nunca, para bien o para mal. Al final esto parece una declaración de principios :P Bueno, es algo que ya estoy olvidando. Le he dado demasiadas vueltas. No me importa tener razón, me preocupaba más quitarme el muerto de encima y la sensación de angustia e invasión del pecho.
Soy "anónimo-2". He leido lo que dices. Lo importante es que tú tenías claras las cosas y lo planteaste. Eso siempre es mejor que no atreverse a decir algo para no molestar y aceptar una situación a regañadientes y si además hablamos de convivir con alguien por lo menos al principio la relación o el bienestar debe ser mutuo. Si en esa 1ª convivencia ya hay muchos choques con el tiempo van a ir en aumento. Entonces es mejor dejar, tal y como tú hiciste. Si esa persona lo entiende mejor, si no es así...entonces es su problema. En una ocasión yo contacté con una persona a la que realmente no conocía ni le conozco. Esa persona tuvo muy pronto las ideas muy claras, que teniamos que terminar. Yo me resistía, me costó mucho hacerme a la idea. Luego surgió algo ajeno a nosotros y por ciertas coincidencias le involucré y tuve que ponerme en contacto con esa persona. Me encontré con una indiferencia y un enfado total por su parte. Visto en la distancia esa persona tenía razón en todo desde el principio y yo debería haber respetado su decisión desde el principio. No lo hice y luego duramente lo pagué. Con todo ello he aprendido muchas cosas sobre mí misma y sobre los demás. 1º para que me respeten, tengo que saber respetarme yo 1º a mí misma. Saber muy bien lo que yo quiero para mí y lo que no (más o menos lo que tú dices). 2º cuando una persona quiere cortar la relación contigo o se aleja, ya sea novio, marido, amigo o amiga hay que dejar que eso siga su curso. No intentar retener. Dejar fluir la vida, tal y como viene. No aferrarse a nadie. Dejar que corra el aire. Al final, eso es lo mejor para las dos partes. 3º nadie está obligado a corresponderme. Tampoco por eso deberé sentirme yo inferior a esa persona. 4º las cosas claras y rectas siempre es la mejor opción. Si no es así, pagaré peaje. 5º debo ser limpia conmigo misma y con los demás. 6º y si después de todo esto, no me comprenden y me juzgan mal, por lo menos tener la conciencia tranquila de que no has pretendido conscientemente hacer daño a nadie. Tan solo el que te hayas podido infligir tú misma. Y esto tb perdonarlo y olvidarlo en la medida de lo posible cuanto antes. Esto parece un decálogo de buena conducta pero es lo que creo.
Esto para tí:
Quiero hablar, quiero expresar... por eso escribo un blog. Quiero reir, quiero amar... por eso lanzo mi voz. Quiero ser, quiero sentir... por eso me parto en dos. Quiero ver, quiero entender... por eso me desligo de mi yo.
Un saludo. Pasa buen día. Quiero corregir algo mío, no son 20, son 22 años sin fumar.
Gracias, me estoy de acuerdo con lo que dices, aunque pienso que te faltan 4 para que sea un decálogo :) Gracias por el poema :P Ya he pagado mucho peaje :) Es la manera en la que aprendo cosas.
Soy "sinónimo-2". Tienes razón, me faltan 4 normas más para ser un "decálogo". Era solo una forma de expresión sin más. Cambiando de tema ...hace mucho tiempo que no escribía en el ordenador. Solo de vez en cuando alguna búsqueda ocasional. Estos días pasados he acudido aquí por lo que te dije el primer día pero a estas horas ya de la noche, creo que ha sido una nueva equivocación mía porque el volver hacerlo, sea en cualquier lugar donde lo haga, me trae problemas. Voy a leer algo tuyo, de vez en cuando te visitaré pero es mejor para mí, no escribir nada. Te deseo suerte y que escribas. Y te envío un saludo.
Me he confundido arriba, es decir soy "anónimo-2". Esta decisión que tomo no tiene nada que ver contigo ni con lo que me dices. Son solo cosas mías. Un saludo repetido.
7 comentarios:
Soy "anónimo-2". De acuerdo en tu última coletilla sobre la asertividad.
Basado en cosas que me han pasado en mi vida, cada vez tengo más claro, que a la hora de dar nuestra opinión a otra persona sobre ella, hay que ser sumamente respetuoso y pensar muy pero que muy mucho lo que le vas a decir, porque si le dices lo que piensas demasiado crudamente pueda ser en la mayoría de los casos que las formas serán injustas, puedan ser incluso desproporcionadas porque parten ya desde nuestro punto de vista subjetivo y lo subjetivo no se suele ajustar a la realidad de la otra persona por muy cargado de razones que creamos estar. Además la otra persona lo va a vivir como un ataque personal y por tanto el fin que perseguimos no lo vamos a alcanzar, en la mayoría de los casos solo conseguimos entristecer a la otra persona, o encoleralizarla y tendremos un nuevo enémigo o alguien ya resentido.
Si no queda otro remedio que decirle a alguien algo, creo que habrá que decirlo de la mejor forma posible, sin humillar, sin añadir comentarios y valoraciones sobre su persona o su grado de valía. Intentar encontrar la forma más justa para los dos partes y para nada de forma hiriente porque a todos nos gusta que nos traten bien y siempre se recibe mejor un cometario sobre nosotros dicho de forma amable.
En mis años de juventud compartí vivienda con mucha gente, el motivo era la economía, que saliera el alquiler más barato. Conocí muy dierentes formas de ser, de pensar, de reaccionar...a la larga es enriquecedor, aunque algunas experiencias han quedado como espinas clavadas en mi alma aunque ya sé que esto es la vida y así aprendemos.
Digo, que una vez, había una persona que me molestaba su forma de actuar, siempre preguntaba demasiadas cosas personales y me hacía sentirme incómoda. Un día, cogí y le dije lo que opinaba de ese comportamiento. Pudiera ser que yo tuviera razón pero el caso es ...que la dejé llorando desconsoladamente. Es una figura que tengo en mi mente, que si pudiera rebobinar mi vida, la cambiaría. Hoy no lo haría, me arrepiento.
Lo mismo que lamento todas las otras veces que he podido ser injusta con alguien en mi vida. Algunas ya no viven y nunca podré pedirle perdón.
Sigue escribiendo. Un saludo.
Estoy de acuerdo hasta cierto punto. Pero nunca nadie tiene razón. No sé hacerlo de otra manera, cuando interiorizo algunas cosas se vuelven tan parte de mi que no controlo la violencia con la que salen.
Después hay personas a las que si no te pones serio no se enteran, no lo reciben, y no lo juzgo con malicia, más bien me da lástima. La inconsciencia es uno de los peores defectos porque no suele tener buenas consecuencias.
En mi vida habitual soy demasiado dulce como para que parezca que esa bruja cruel vive dentro de mi, y hay gente que no se da cuenta, hasta que sale, de que no todo el monte es orégano.
Mi único objetivo era que supiese que no me quería ir a vivir con él. Sus sentimientos pasaron a un segundo plano en el momento que quiso saber la verdad y pedía más y más. La ignorancia es la dueña de la felicidad. Si te doy una razón y no te vale, te daré otra o ejemplificaré, siempre me estoy explicando y no me doy cuenta de que tengo que parar, y decir, de acuerdo, a ti no te sirve pero es mi justificación. Nunca digo que una vida es fácil, ninguna lo es y dependen del grado de madurez. Yo sé que no lo miraré igual, y hasta cierto punto no me preocupa mucho que el no me mire igual.
Vivir juntos es compartir demasiado para mi con esta persona. Conozco mis limitaciones y soy capaz de juzgar rápidamente si una persona me conviene (es un don y una maldición, lo sé por experiencia). Le dije que nuestros carácteres no eran compatibles y que era culpa mía pero eso él no lo escuchó. Se quedó en los detalles puntuales que ejemplificaban su conducta y los utlizó para acentuar cosas por las que él se sentía culpable.
Puedo respetar su forma de actuar, lo cual no significa que la tenga que compartir. Sé lo que llevó a mi amigo a actuar como lo hizo, pero yo no estaba dispuesta a jugar el rol que él quería adjudicarme y que yo veía venir. Yo no sé mucho de la vida, sólo tengo 26 años. Pero lo que tengo muy claro es que no quiero.
Nunca me preocupó no ser amada por alguien a quien yo no amo, ni me quita el sueño tener enemigos. No aspiro a no tenerlos soy demasiado dificil y muy compleja.
Considero que la justicia está algo sobrevalorada, nadie es justo nunca, para bien o para mal.
Al final esto parece una declaración de principios :P
Bueno, es algo que ya estoy olvidando. Le he dado demasiadas vueltas. No me importa tener razón, me preocupaba más quitarme el muerto de encima y la sensación de angustia e invasión del pecho.
Soy "anónimo-2". He leido lo que dices. Lo importante es que tú tenías claras las cosas y lo planteaste. Eso siempre es mejor que no atreverse a decir algo para no molestar y aceptar una situación a regañadientes y si además hablamos de convivir con alguien por lo menos al principio la relación o el bienestar debe ser mutuo. Si en esa 1ª convivencia ya hay muchos choques con el tiempo van a ir en aumento. Entonces es mejor dejar, tal y como tú hiciste. Si esa persona lo entiende mejor, si no es así...entonces es su problema.
En una ocasión yo contacté con una persona a la que realmente no conocía ni le conozco. Esa persona tuvo muy pronto las ideas muy claras, que teniamos que terminar. Yo me resistía, me costó mucho hacerme a la idea. Luego surgió algo ajeno a nosotros y por ciertas coincidencias le involucré y tuve que ponerme en contacto con esa persona. Me encontré con una indiferencia y un enfado total por su parte.
Visto en la distancia esa persona tenía razón en todo desde el principio y yo debería haber respetado su decisión desde el principio. No lo hice y luego duramente lo pagué.
Con todo ello he aprendido muchas cosas sobre mí misma y sobre los demás.
1º para que me respeten, tengo que saber respetarme yo 1º a mí misma. Saber muy bien lo que yo quiero para mí y lo que no (más o menos lo que tú dices).
2º cuando una persona quiere cortar la relación contigo o se aleja, ya sea novio, marido, amigo o amiga hay que dejar que eso siga su curso. No intentar retener. Dejar fluir la vida, tal y como viene. No aferrarse a nadie. Dejar que corra el aire. Al final, eso es lo mejor para las dos partes.
3º nadie está obligado a corresponderme. Tampoco por eso deberé sentirme yo inferior a esa persona.
4º las cosas claras y rectas siempre es la mejor opción. Si no es así, pagaré peaje.
5º debo ser limpia conmigo misma y con los demás.
6º y si después de todo esto, no me comprenden y me juzgan mal, por lo menos tener la conciencia tranquila de que no has pretendido conscientemente hacer daño a nadie. Tan solo el que te hayas podido infligir tú misma. Y esto tb perdonarlo y olvidarlo en la medida de lo posible cuanto antes.
Esto parece un decálogo de buena conducta pero es lo que creo.
Esto para tí:
Quiero hablar,
quiero expresar...
por eso escribo un blog.
Quiero reir,
quiero amar...
por eso lanzo mi voz.
Quiero ser,
quiero sentir...
por eso me parto en dos.
Quiero ver,
quiero entender...
por eso me desligo de mi yo.
Un saludo. Pasa buen día.
Quiero corregir algo mío, no son 20, son 22 años sin fumar.
Gracias, me estoy de acuerdo con lo que dices, aunque pienso que te faltan 4 para que sea un decálogo :)
Gracias por el poema :P
Ya he pagado mucho peaje :) Es la manera en la que aprendo cosas.
Soy "sinónimo-2". Tienes razón, me faltan 4 normas más para ser un "decálogo". Era solo una forma de expresión sin más.
Cambiando de tema ...hace mucho tiempo que no escribía en el ordenador. Solo de vez en cuando alguna búsqueda ocasional. Estos días pasados he acudido aquí por lo que te dije el primer día pero a estas horas ya de la noche, creo que ha sido una nueva equivocación mía porque el volver hacerlo, sea en cualquier lugar donde lo haga, me trae problemas.
Voy a leer algo tuyo, de vez en cuando te visitaré pero es mejor para mí, no escribir nada.
Te deseo suerte y que escribas. Y te envío un saludo.
Me he confundido arriba, es decir soy "anónimo-2".
Esta decisión que tomo no tiene nada que ver contigo ni con lo que me dices. Son solo cosas mías.
Un saludo repetido.
Tranquila no me lo tomo a mal... :) Como nunca me tomé a mal lo que decías :P
Patunetes y cuídate.
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