Pasamos
de no existir
a los dos centímetros,
y unos meses después
a los cincuenta y pico.
Y entonces,
un día tonto
// a partir de entonces nuestro cumpleaños,
cambiaron nuestro universo
húmedo.
Por este mundo
etéreo.
Y nos obligaron
a respirar
este aire poluto.
Que nos oxida
las entrañas.
Y el primer llanto
hizo a todos saber
que por fin
habíamos llegado.
Siendo desde entonces
más de uno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario